Considerando la osteoartritis a cualquier edad
Los problemas de movilidad en perros más jóvenes pueden estar relacionados con la afección que a menudo se observa en mascotas mayores
Por Heidi Lobprise, Dra.MEDICINA+CIRUGÍA | DOLOR
Escrito por Heidi Lobprise, DVM, DAVDC
Los problemas de movilidad en perros más jóvenes pueden estar relacionados con la afección que a menudo se observa en mascotas mayores
Cuando vemos a un perro mayor con movilidad reducida, pensamos en osteoartritis (OA), pero delegar el problema a esa etapa de la vida puede resultar engañoso. De hecho, aunque ciertamente vemos que la incidencia y el impacto de la OA aumentan a medida que los perros envejecen, en su mayor parte se trata de una afección secundaria a problemas ortopédicos que probablemente ocurrieron cuando el paciente era más joven.
Muchas enfermedades ortopédicas del desarrollo tienen sus comienzos en perros jóvenes, incluyendo displasia de cadera y codo, osteocondrosis, luxación rotuliana y necrosis avascular de la cabeza femoral. Se agregan a la lista lesiones tales como las del ligamento cruzado craneal, y el manejo adecuado desde el punto inicial es esencial.
Además, el tamaño del animal importa. No sólo perros y razas más grandes están predispuestos a displasia, sino que la obesidad desempeña un papel importante en la OA. Ciertamente, el tamaño y el peso adicional pueden generar una tensión indebida en las articulaciones que ya están comprometidas, pero los aspectos proinflamatorios del tejido adiposo contribuyen a la inflamación crónica sistémica general que exacerba el dolor crónico y el envejecimiento. Mantener un peso ideal es fundamental.
Es probable que cada médico esté bien informado sobre el impacto del dolor crónico o maladaptativo, con la plasticidad central y la sensibilización, y el círculo vicioso de componentes y marcadores inflamatorios. Los signos pueden ser sutiles al principio, por lo que la evaluación de la movilidad y la postura puede comenzar con un propietario informado y continuar en la clínica con análisis de la forma de caminar, radiografías y palpación. A veces, localizar un dolor específico resulta complicado y puede resultar útil utilizar dispositivos tal como una herramienta de imágenes térmicas e incluso un monitor portátil que pueda cuantificar el dolor agudo y crónico por medio de la medición de bioseñales directas de dolor (PainTrace; BioTraceIT).
Terapias con medicamentos
Lidiar con OA es un manejo, no sólo un tratamiento, aunque los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) siguen siendo la base de estas afecciones. Explorar enfoques multimodales puede llevar a agregar otros componentes o sustituir los AINE, de ser necesario.