3 razones para pensar en tener un consultorio
Una vía para generar riqueza. El deseo de aprender a ser un mejor delegador y líder. La vocación de crear un espacio sano con el fin de que los veterinarios florezcan. Todo esto es posible, como propietario de un hospital veterinario.
Una vía para generar riqueza. El deseo de aprender a ser un mejor delegador y líder. La vocación de crear un espacio sano con el fin de que los veterinarios florezcan. Todo esto es posible, como propietario de un hospital veterinario.
Julie Reck, DVM
Si usted a hojeado una publicación veterinaria durante la última década hay muchas posibilidades de que haya visto encabezados como estos: “Consultorio veterinario corporativo busca propietarios independientes”. “El bienestar mental de los profesionales veterinarios cae, mientras que la depresión y las tasas de suicidio aumentan”. “Ser propietario de un consultorio veterinario se reduce ¿hay que culpar al cambio de género?”
Estas tendencias son importantes, pero tal vez es momento de buscar oportunidades para cambiar nuestras perspectivas y corregir el curso con el fin de invertirlas.
Un descubrimiento modelador de carreras
Cuando se me preguntó acerca del viaje que me condujo para abrir mi consultorio hace seis años, comienzo de manera típica admitiendo que descubrí “de manera inadvertida” las oportunidades financieras proporcionadas al ser propietario de un consultorio.
En 2010, yo manejaba un servicio veterinario de hospedaje de mascotas, que crecía con rapidez. Considere agregar veterinarios a este servicio móvil, pero mi hogar ya no podía albergar los suministros médicos o a mis empleados. Comencé a buscar consultorios pequeños en venta a través de anuncios locales en las Carolinas, con el pensamiento de que podría haber opciones disponibles para actuar como núcleo comercial para mi servicio de hospicio de mascotas.