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Las idiosincrasias de los gatos con comezón
Sí, los gatos no son pequeños perros. ¿Piensa que lo ha escuchado antes? Bueno, nosotros le mostraremos algunas cosas
Los gatos no son perros pequeños -usted ha escuchado esto antes. Pero esto no es más aparente que en la dermatología: “Usted no puede basar su lista dermatológica diferencial según la parte afectada del cuerpo por la evidencia de prurito, tal como lo puede hacer con los perros”, menciona Rudayna Ghubash, DVM, DACVD.
Así que ¿cuál es la respuesta para los misterios dermatológicos de los felinos? La Dra. Ghubash reitera que debido a que la respuesta fisiológica del gato a las oportunidades alergénicas es tan distinta a la de los perros, que se necesita un enfoque diferente para diagnosticar lo que ocasiona los signos clínicos.
El enfoque recomendado por la Dra. Ghubash para un gato que llevan a consulta por prurito es comenzar con una historia clínica cuidadosa y deliberada, y examinar a cada gato prurítico de una manera metódica. Ella estima que casi 50% de su información valiosa provendrá de la historia clínica, si usted le hace al cliente las preguntas correctas. Por ejemplo, es más probable que un gato menor de seis meses tenga un parásito subyacente o algún dermatofito ocasionando el prurito. La atopia es poco usual en gatitos.
Una historia clínica completa de las enfermedades previas y actuales del gato es muy importante. Por ejemplo, los gatos no tienen pododermatitis por alergia como la tienen los perros. Si lo tienen, es más probable que la causa subyacente sea el pénfigo foliáceo. La Dra. Ghubash menciona que es mas comun la apariencia de “batir y hornear” por las costras de las orejas.
Figura 1. Un gato con hipersensibilidad al piquete de mosquitos, mostrando lesiones en el pabellón auricular y narinas.
Figuras 2 y 3. Gatos con lesiones de pénfigo foliáceo en las orejas.
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