Contáctanos Síguenos Veterinary Medicine Instagram
Suscríbete
Volumen 6, número 5
Abr / May 2012 . vol. 6 / núm. 5

Opioides: Lo bueno, lo malo y el futuro

Malentendidos y usos inadecuados hacen que algunos veterinarios rehúsen utilizar esta forma de control de dolor en mascotas. Aquí está el por qué, en muchos casos, los opioides permanecen como una excelente opción.

Por Mark E. Epstein, DVM, DABVP, DAAPM

LO MEJOR DEL CVC



Malentendidos y usos inadecuados hacen que algunos veterinarios rehúsen utilizar esta forma de control de dolor en mascotas. Aquí está el por qué, en muchos casos, los opioides permanecen como una excelente opción.

Mark E. Epstein, DVM, DABVP, CVPP

Los opioides sintéticos permanecen como las herramientas más poderosas y tal vez más útiles para manejar el dolor y evitar un estado mal adaptativo de dolor, tanto en pacientes humanos como veterinarios. Sin embargo, la razón única más común que citan los veterinarios para evitar el uso de analgesia de opioide es el temor a los efectos adversos.1 Estas preocupaciones pueden abordarse con éxito y evitarse por lo general, al comprender cómo estos medicamentos funcionan dentro del sistema nervioso central y periférico, desarrollando estrategias ahorradoras de opioides y conociendo cómo reconocerlos con prontitud y tratar los efectos adversos en caso de que aparezcan.

CÓMO FUNCIONAN LOS OPIOIDES
La activación de los receptores opioides mu inhibe la liberación presipnática y la respuesta postsináptica a los neurotransmisores excitatorios, cerrando los canales de calcio y abriendo los canales de potasio. El resultado es impedir la transmisión del dolor.

Crea una cuenta o inicia sesión para leer todo el contenido, ¡es gratis!