Ver algo, hacer algo: ¿por qué esperar?, ¡aspire!
La inspiración de un oncólogo veterinario para una campaña con el fin de detectar cáncer de manera más temprana y así salvar más vidas
DE AVANZADA
Sue Ettinger, DVM, DACVIM (oncology)
Lo perdí todo. Mucho tiempo. No encontré un tumor en el perro de mi propia ayudante veterinaria. Le fallé a Smokey y a Amanda. ¿Cómo podría yo, un especialista en cáncer, haber pasado por alto este tumor?
Smokey fue mi inspiración para un nuevo programa de conciencia del cáncer llamado “Ver algo, Hacer algo”. Estoy en una misión para ayudarnos a detectar tumores más temprano -ya sea personal veterinario, o propietario de mascotas.
Antecedentes de masas benignas
En ese momento, Smokey era un pitbull blanco de 10 años de edad que pertenecía a unos de mis principales ayudantes, Amanda. Adoraba a ambos. Smokey era uno de esos sorprendentes perros conmovedores, que desprendía luz por cada movimiento de su rabo. Todo aquel que conocía a Smokey lo amaba. Era el perro de toda la vida de Amanda.
Yo había aspirado más de 10 masas de piel en Smokey a lo largo de los años y las masas siempre habían sido lipomas grasos benignos. Cuando Amanda mencionó que traería a Smokey para verificar unas nuevas masas unas semanas antes, ninguno de nosotros se preocupó. De hecho, el primer día Amanda trajo a Smokey a la clínica y estábamos tan ocupados, que nunca le hicimos el aspirado a Smokey. Asumimos que tan solo era otro lipoma benigno. Nos vimos complacientes. Todas las demás masas eran benignas. ¿Por qué esta debería ser diferente?
Cuando Smokey regresó a la siguiente semana, examiné la masa de 7 cm que estaba fijada profundamente al tejido subyacente de la zona lateral izquierda. Honestamente, no se veía como un tumor maligno. Pero conforme hice mi aspirado, podía ver reunirse la sangre en mi aguja y jeringa. De inmediato supe que no era un lipoma. Aspiré la masa en unas cuantas zonas más y enviamos las laminillas a laboratorio para examen citológico.
Le dije a Amanda que mi sospecha clínica era un tumor. Aparecieron lágrimas en sus ojos. Como profesionales veterinarios tratamos con cáncer en perros y gatos todos los días, pero nada nos puede preparar en cuanto se trate de su mascota. Pude ver que la mente de Amanda comenzaba a correr y apagarse al mismo tiempo, le di un gran abrazo y esperamos ansiosamente toda la noche por los resultados de la citología de Smokey.